lunes, 23 de julio de 2007

Tránsitos planetarios que desbordan

Aunque la astrología nunca ha sido reconocida, a pesar de haber ocupado el primer puesto en la observación de los fenómenos del espacio y su influencia sobre la tierra en tiempos ancestrales, llegando incluso a ser llamada la primera ciencia, no cabe duda que aquello que ocurre fuera de la atmósfera terrestre nos afecta de una u otra manera.

En la actualidad, entre tanto engaño, deseperanza y desprestigio, y en aspectos de la vida a los cuales no se les tiene aún explicación, mucho cuesta encontrar personas que realmente conozcan la astrologia y la muestren como realmente es: algo personal y único que no puede ser "global" para todos los individuos de un signo zodiacal, por ejemplo.
Todo buen astrólogo sabe que la configuración de los cielos hoy trae confusión y rebelión, marcadas por un Neptuno nebuloso y volátil y un Urano controversial y extravagante, colocados sobre el cinturón zodiacal sobre Acuario, el primero, y Piscis el segundo, posiciones estas bastante incómodas para ambos planetas.
En el caso particular de las personas con Ascendente en Cáncer y salvando las configuraciones solares y planetarias individuales y únicas, la entrada de nada menos que cinco tránsitos a las cúspides de algunas casas en las próximas semanas (que en este caso son fijas frente a la influencia de los planetas) inclinan hacia una serie de eventos de diversión, despreocupación y aventuras marcadas por la expansión extrema de Júpiter en la casa 5, crecimiento y avances en las finanzas bajo la premisa del ahorro que conlleva la entrada de Saturno a la casa 2, un marcado cambio e interés hacia los temas relacionados con la muerte, el sexo, las inversiones y los temas ocultos que oscilan entre la violencia, las energías reprimidas, la falta de consciencia, la extrema inspiración y las ventajas de sociedades e inversiones comunes bajo el aturdimiento extremo de Urano y Neptuno acercándose a la casa 8 y, finalmente, la regeneración y cambios en temas de salud así como la autocrítica y exigencia desbordada de Plutón entrando en la casa 6.
Como buena hija de la balanza no puedo más que oscilar a ver cómo manejo las influencias de los tránsitos que llegarán por mi ascendente en Cáncer y, particularmente, moverán los cimientos de mi cordura al tocar mi luna bruja en la casa 8 en un mutable Piscis que me eleva a la musa perdida, esperando que el desconcierto de la oscuridad propia de esta casa y las ventajas para mis inversiones queden lo mejor posible después de tal arremetida. Y en honor a la inspiración encendida que ya me toca, no puedo más que buscar entre mis poemas algo que me identifique con lo que vendrá... espero que los demás cangrejos ascendentes sepan leer entre líneas y se vean también en estos versos.

ADENTRO, MÁS ADENTRO...

Adentro, más adentro,
hasta encontrar en mí todas las cosas.
Afuera, más afuera,
hasta llegar a ti en todas las cosas.

Secreto panteismo,
mi oración es así,
tú estás en todo
y todo en mí.

Gerardo Diego (1896-1987): Poeta español de la generación del '27.
Fuente: http://amediavoz.com/diego.htm