sábado, 22 de agosto de 2015

Hoy seria tu cumpleaños

Después de casi dos años de su partida, apenas ahora caigo en cuenta que esta pasión por fotografiar flores empezó el día que le fuimos a decir “hasta pronto” cuando me dediqué a dejar constancia de todas las flores que llevamos como homenaje a él. Fueron muchas, de todos los colores y tamaños, y hasta hace poco, conservé los pétalos secos, los cuales saqué cuando ya el recuerdo vino sin lágrimas.
Sin embargo, desde entonces, voy por la vida viendo la belleza de la naturaleza y sus colores en cada planta que pasa ante mis ojos, e incluso, a veces, las veo sin querer ni buscar. Para mí ahora las flores representan la belleza de la vida, la diversidad de nuestro planeta y el espíritu intocable de nuestra madre tierra. Esa vida que nace y muere, que descansa por las noches y revive con la luz del día, que acepta serenamente el pasar de la lluvia y el sol, que se regenera a pesar de la sequía, que florece sin importar cómo ni dónde.

Así, imagino y siento que el paso por el mundo de mi tío dejó en muchas personas una marca, un recuerdo y un mensaje de luz y alegría, con sus chistes y su risa, con sus consejos y abrazos, con la imagen que tengo de él desde que lo conocí cuando yo tenía apenas siete años. Ya hoy, puedo dedicarle nuevamente una memoria sin que mi corazón se sienta tan apretado, y aunque haya aprendido a vivir sin él y a entrar a su casa sabiendo que ya no está, siempre conservaré mis recuerdos de tantos años compartidos.

Y en cada flor recordaré que estuvo aquí, por la ley natural tuvo que partir inesperadamente antes que yo, y que debo seguir adelante recordando su risa y su luz.