Diversidad de culturas ancestrales han dejado en los anales de la historia referencias de poderes que el hombre tuvo y perdió por razones místicas, si se le quiere llamar de alguna manera. Un claro ejemplo de ello es la antigua sabiduría tibetana, que se dice guarda en lugares secretos y desconocidos, una serie de estas referencias a la capacidad de leer el pensamiento, a través de la lectura del aura, de ir a los confines del mundo y el tiempo en viajes mágicos e incorpóreos, o viajes astrales, y mover cosas de cualquier tamaño con la voluntad.
Sobre la base de esta referencia en particular, podemos ver claramente que en pinturas antiguas, incluso hasta renacentistas, los artistas plasmaban un halo de luz en las cabezas de sus personas, el cual consiste, según la cultura tibetana, en la corona del aura. Esta luz o energía que mana de los seres, no sólo los humanos, refleja los pensamientos, intenciones, estados anímicos e incluso el estado de salud. Por otro lado, se afirma que los sueños, en especial los premonitorios, no son más que la capacidad dormida del hombre de viajar, en el tiempo y el espacio, y ver posibles hechos futuros, y pasados también. Además, son muchas las personas que afirman haber salido de sus cuerpos para trasladarse a otros lugares a la velocidad del pensamiento, sin que esto haya sido un sueño sino un hecho ocurrido a plena consciencia. Finalmente, y una de mis teorias descabelladas, es la incloncluyente explicación científica concreta de la manera en que se construyeron algunos monumentos como Stonehedge y las Pirámides.¿No podría haber sido por el llamado poder de la telekinesis? Por desgracia, la enfermedad de la corrupción, el poder y los vicios llevó al hombre a dejar de tener estos poderes pues se les daba un uso inapropiado y egoista, sin mencionar su uso para la destrucción.
Cierto o no, a mi me hace pensar que tal vez hemos llegado a inventar lo que llamamos súper poderes sin darnos cuenta que son poderes naturales que nuestros ancestros poseyeron y perdieron en el devenir de la humanidad. En caso que tales referencias fueran verdaderas, sólo me gustaría tenerlos o desarrollarlos con fines positivos y benéficos; de lo contrario, me seguirán gustando los poderes del Capitán Centella (un tipo por demás normal)...
Sobre la base de esta referencia en particular, podemos ver claramente que en pinturas antiguas, incluso hasta renacentistas, los artistas plasmaban un halo de luz en las cabezas de sus personas, el cual consiste, según la cultura tibetana, en la corona del aura. Esta luz o energía que mana de los seres, no sólo los humanos, refleja los pensamientos, intenciones, estados anímicos e incluso el estado de salud. Por otro lado, se afirma que los sueños, en especial los premonitorios, no son más que la capacidad dormida del hombre de viajar, en el tiempo y el espacio, y ver posibles hechos futuros, y pasados también. Además, son muchas las personas que afirman haber salido de sus cuerpos para trasladarse a otros lugares a la velocidad del pensamiento, sin que esto haya sido un sueño sino un hecho ocurrido a plena consciencia. Finalmente, y una de mis teorias descabelladas, es la incloncluyente explicación científica concreta de la manera en que se construyeron algunos monumentos como Stonehedge y las Pirámides.¿No podría haber sido por el llamado poder de la telekinesis? Por desgracia, la enfermedad de la corrupción, el poder y los vicios llevó al hombre a dejar de tener estos poderes pues se les daba un uso inapropiado y egoista, sin mencionar su uso para la destrucción.
Cierto o no, a mi me hace pensar que tal vez hemos llegado a inventar lo que llamamos súper poderes sin darnos cuenta que son poderes naturales que nuestros ancestros poseyeron y perdieron en el devenir de la humanidad. En caso que tales referencias fueran verdaderas, sólo me gustaría tenerlos o desarrollarlos con fines positivos y benéficos; de lo contrario, me seguirán gustando los poderes del Capitán Centella (un tipo por demás normal)...